CIUDAD DE MÉXICO. 

El llamado “justiciero de la Narvarte” acudió ante el Ministerio Público de la Fiscalía Desconcentrada en Benito Juárez a declarar por el homcidio de un supuesto asaltante ocurrido el domingo pasado afuera de una taquería.

En entrevista radiofónica, el subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), Óscar Montes de Oca, explicó que se trata de un escolta que trabaja para una familia y el día de los hechos se percato que, después de comer, tres sujetos comenzaron a hacer señas extrañas y uno de ellos asaltó la caja del negocio con razón social La Costilla.

El guardaespaldas acudió de manera voluntaria ante el Ministerio Público y puso a disposición de la autoridad el arma de fuego que utilizó el día de los hechos para abatir al presunto delincuente quien murió en el lugar.

El subprocurador Montes de Oca explicó que el escolta cuenta con permiso de portación de arma de fuego y declaró que actuó en legítima defensa de él y de la familia que custodiaba por lo que, mientras se realizan las investigaciones le fue permitido retirarse bajo las reservas de ley.

Fue el domingo cuando tres sujetos intentaron asaltar la taquería ubicada en en Cumbres de Maltrata, a la altura de la Glorieta de Vértiz. Los tres hombres comieron y cuando terminaron se pararon y uno de ellos se dirigió hacia un automóvil mientras que un segundo comenzó a hablar por teléfono.

El escolta se percató que los asaltantes comenzaron a hacerse señas entre ellos cuando uno de ellos sacó un arma de fuego y amagó a la persona que estaba en la caja y le pidió la cuenta del día. Cuando el asaltante se acercaba hacia donde estaba una familia comiendo el escolta sacó su pistola y le disparó para luego irse junto con la familia que cuidaba.

De acuerdo con reportes de la Procuraduría General de Justicia capitalina, el ladrón, de aproximadamente 20 años, portaba un arma de juguete, y lo acompañaba al menos dos cómplices, quienes huyeron del lugar tras caer muerto su amigo.

mca