¿Quién no conoce la historia de Romeo y Julieta? En la cual Romeo se involucra en un tormentoso y apasionado romance adolescente que, finalmente, lleva a ambas partes a un trágico final… Ok, todas sabemos más o menos la trama, pero lo que no es tan conocido, es el hecho de que hay algo más riesgoso que morir de amor: vivir en un enamoramiento constante.
Si bien el síndrome de Romeo y Julieta es el amor llevado al extremo, el trastorno de Romeo es enamorarse del amor, y eso es lo que le sucede a muchas mujeres.
Las personas que lo experimentan se alimentan de la sensación de adrenalina que trae consigo toda nueva relación. Los nervios, el clímax de las primeras citas, la elevación del autoestima, un sentimiento que todos disfrutamos en su minuto, pero que quienes “sufren” de este síndrome no pueden dejar ir.
¿Cómo lo podemos resumir? En palabras simples, es estar enamorado de la sensación de enamoramiento, para luego sentirse decepcionado si se alcanza una relación madura basada en amor.
Durante la etapa de enamoramiento todo parece ir a la perfección y las personas con este síndrome alardean de los felices y enamorados que están de su pareja de turno. Las redes sociales son una muestra constante de la feliz pareja.
Sin embargo, tarde o temprano, el Romeo que estas personas llevan adentro hace su aparición: cuando el romance sienta cabeza, la pareja se establece y el enamoramiento se convierte en amor, es hora de poner los pies en la tierra y eso causa estragos. Lo que para el resto significa estabilidad y seguridad, para un Romeo se traduce en decadencia.
La relación se consolida, crece la confianza y los vínculos se refuerzan, pero por otra parte, se pierde la intensidad de los primeros meses, la emoción y el nervio, lo que para un Romeo significa una catástrofe. Para estas personas, el amor no se concibe como un momento de plenitud y aceptación del otro (con todo lo que eso significa).
Cuando esto sucede, los Romeo comienzan a desesperarse e intentan revivir, a toda costa, la pasión del pasado. La persona agotará todos sus recursos para reavivar la llama… el problema es que con cada intento fallido crece la frustración.
Tras varios intentos sin prosperar, la desconfianza se apoderará de la relación, el Romeo culpará a su pareja de cualquier cosa y ante ese gris escenario de que “nada tiene solución”, la persona tendrá la sensación que no queda más remedio que separarse… para volver a vivir el enamoramiento, con otro.
¿Cuál es el principal causante de este síndrome? La evidente desconexión con la realidad. Es el resultado de una constante idealización del amor, desde la infancia, mezclado con los buenos recuerdos de las primeras relaciones amorosas.
La única forma de curarlo es aplicar un dosis pura de realidad. Demostrar que el amor es un camino, con errores, pero que se construye con dedicación, solidaridad y confianza mutua.
Finalmente, el verdadero amor es aquel que te hace tener los pies en la tierra y ser feliz con ello.
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Post y Contenido Original de : UPSOCL
http://www.upsocl.com/relaciones/el-sindrome-de-romeo-es-un-trastorno-comun-en-las-mujeres-y-puede-destruir-relaciones/
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