La violencia y las muertes en Israel y los territorios palestinos alcanzaron niveles récord en el año 2023. El 7 de octubre, un gran ataque de Hamás marcó un hito en la historia del conflicto entre Palestina e Israel.
El 7 de octubre por la mañana, ocurrió un evento significativo que cambió el curso del conflicto entre Palestina e Israel. Hamás llevó a cabo un ataque masivo.
Durante el año 2023, Israel y los territorios palestinos ocupados experimentaron un período de violencia y muerte sin precedentes. El grupo islamista Hamás llevó a cabo un ataque devastador contra los judíos, considerado el peor desde el Holocausto. Además, la Franja de Gaza se vio afectada por la guerra más letal que haya experimentado en su historia, mientras que en Cisjordania ocupada se desató una ola de violencia que supera incluso a la Segunda Intifada.
El 7 de octubre fue un día crucial en la historia del conflicto entre Palestina e Israel, debido al impactante ataque llevado a cabo por Hamás. Durante este ataque, se lanzaron alrededor de 3 mil cohetes y milicianos infiltrados atacaron simultáneamente. Como resultado, se reportó la muerte de aproximadamente 1,200 personas y 250 personas fueron secuestradas en las poblaciones israelíes cercanas a la Franja de Gaza.
En los primeros días después del ataque, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, describió conmoción cómo tomaron a muchos niños, los ataron, los quemaron y los ejecutaron. También mencionó que decapitaron soldados y acribillaron a jóvenes que asistieron a un festival, además de secuestrar a ancianas y bebés.
Nunca antes habíamos presenciado tanta brutalidad en la historia de Israel, desde su creación en 1948, ni siquiera durante el Holocausto en la Segunda Guerra Mundial, enfatizó.
Los kibutz cercanos a Gaza se han convertido en un escenario de caos, con casas y vehículos incendiados y cuerpos dispersos. Al mismo tiempo, en varias ciudades de Israel, las sirenas de alerta aérea siguen sonando debido a los lanzamientos de cohetes, incluso en Tel Aviv y Jerusalén.
Debido a los recurrentes ataques provenientes del sur de Líbano y Siria por parte de milicias solidarias con Hamás, alrededor de 200 mil personas se encuentran desplazadas en Israel, incluyendo a los habitantes del extremo norte del país.
Hasta ahora, se han salvado 110 personas que estaban siendo retenidas como rehenes en Gaza, de las cuales 86 son israelíes y 24 tienen otras nacionalidades. Aún quedan 129 personas dentro de la Franja, pero se cree que 21 de ellas han fallecido. Además, se han recuperado los cuerpos de otros ocho rehenes que perdieron la vida en el territorio palestino, incluyendo a tres que fueron asesinados por error por las fuerzas israelíes.
Después del ataque de Hamás, Israel respondió de manera contundente con una ofensiva aérea, marítima y terrestre en Gaza. Hasta el momento, se han registrado más de 19,600 muertos, siendo el 70% mujeres, niños y ancianos. Además, hay más de 52,500 heridos, alrededor de 7,500 desaparecidos bajo los escombros y 1.9 millones de desplazados, lo que representa el 85% de la población de la zona.
Esta es la guerra más devastadora que ha ocurrido en la historia de Gaza. Según la organización Save the Children, la cantidad de niños fallecidos, incluyendo bebés prematuros, en esta región supera el número de niños asesinados en todas las zonas de conflicto a nivel mundial desde el año 2019.
Además, se registró la muerte de más de 300 profesionales de la salud y 57 periodistas dentro del área conocida como la Franja.
Según el Comité de Protección de Periodistas, hasta el 17 de diciembre, se registraron 64 periodistas fallecidos en la guerra, incluyendo cuatro israelíes y tres libaneses. Este periodo ha sido considerado como el más peligroso para los profesionales de la comunicación desde que la organización comenzó a recopilar datos en 1992.
Grandes áreas de la Franja de Gaza fueron destruidas y muchas familias, que incluyen a niños, ancianos o personas con discapacidad, se ven obligadas a desplazarse, incluso caminando, de un lugar a otro mientras los bombardeos retumban a su alrededor. Desafortunadamente, no encuentran refugio seguro ni siquiera en zonas designadas como "humanitarias".
Además, una gran cantidad de personas viven en condiciones de hacinamiento y expuestas a las inclemencias del tiempo durante el invierno, en medio de una crisis humanitaria sin precedentes debido a la falta de agua potable, alimentos, medicinas, electricidad y combustible.
Los soldados israelíes han atacado directamente los hospitales, lo que ha provocado que colapsen. Las mujeres están dando a luz bajo el fuego, los heridos están siendo atendidos en el suelo porque no hay camas disponibles y no se les está administrando anestesia. Además, más de 325.000 personas han contraído alguna de las epidemias que se han propagado.
La asistencia humanitaria llega de manera limitada y escasa, mientras que la presión internacional para detener la violencia no se está cumpliendo a pesar de una resolución de la Asamblea de la ONU al respecto.
Netanyahu afirmó recientemente que seguirán adelante sin duda alguna, a pesar de la presión internacional. Nada los detendrá hasta lograr la victoria y la destrucción de Hamás.
La situación en Cisjordania es extremadamente tensa y violenta en estos momentos. Desde 2002, que fue el año más mortal de la Segunda Intifada, la ocupación israelí ha llevado a cabo redadas violentas a diario, lo que ha generado enfrentamientos con las milicias palestinas locales. Además, ha habido un aumento en los ataques mutuos entre palestinos y colonos judíos, llegando incluso a la destrucción de aldeas enteras por parte de estos últimos.
Durante el año 2023, un total de 509 palestinos perdieron la vida en situaciones de violencia. De estos, 301 fallecieron durante el conflicto en Gaza, incluyendo a más de 70 menores de edad.
Además de eso, hay más de 3 mil 450 palestinos que han resultado heridos y más de 2 mil 400 que han sido detenidos, siendo que muchos de ellos no tienen ningún cargo ni han sido sometidos a juicio.
Por otro lado, el gobierno liderado por Netanyahu y sus aliados ultraortodoxos y ultranacionalistas han estado promoviendo una política de incremento en la ocupación y colonización de Cisjordania. Su discurso abiertamente racista y antiárabe rechaza la solución de dos Estados, la cual es ampliamente apoyada por la comunidad internacional, incluyendo a Estados Unidos, su principal aliado.
Las relaciones entre el gobierno de Israel y Estados Unidos se han vuelto más tensas. A pesar de que Estados Unidos ha brindado apoyo militar a Israel, ahora está pidiendo que la Autoridad Nacional Palestina, que actualmente gobierna partes pequeñas de Cisjordania y está pasando por una crisis política, se haga cargo de Gaza después de la guerra.
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