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Estados Unidos se encuentra en riesgo de enfrentar el cierre del Gobierno
Es poco probable que ambas cámaras del Congreso logren llegar a un acuerdo para aprobar un plan de financiación a corto plazo y así evitar el cierre.
Es poco probable que ambas cámaras del Congreso lleguen a un acuerdo para aprobar un plan de financiamiento a corto plazo y evitar el cierre.
El sábado se plantea la posibilidad de que Estados Unidos vuelva a enfrentar un cierre del Gobierno federal. Esto ha sido una tradición en las administraciones divididas entre republicanos y demócratas en el país. Sin embargo, en esta ocasión, sería especialmente complicado ya que se produce en un momento delicado para la economía más grande del mundo.
Aún faltan algunas horas para que los fondos federales para el año fiscal 2023 expiren, pero es poco probable que tanto la Cámara de Representantes como el Senado lleguen a un acuerdo para aprobar un plan de financiamiento a corto plazo que permita que las agencias federales sigan operando mientras se establecen los presupuestos para el año 2024.
El principal desafío proviene de un pequeño pero poderoso grupo de representantes republicanos que están aliados con el expresidente Donald Trump (2017-2021) y no están satisfechos con las concesiones del presidente de la Cámara Baja, Kevin McCarthy, a la Casa Blanca en mayo pasado. Estas concesiones permitieron aprobar un plan que evitó que el país cayera en suspensión de pagos por primera vez en su historia.
Sin embargo, a pesar de que en esa situación las consecuencias de no pagar la deuda nacional habrían sido desastrosas para la economía de Estados Unidos, la mayoría de expertos están de acuerdo en que un cierre del gobierno, al menos de manera inmediata, no tendría un impacto significativo.
En un estudio sobre las potenciales ramificaciones del cierre, el principal economista en AXA IM, Gilles Moëc, señaló que este tipo de situaciones, que ocurren con bastante regularidad en el país (se han registrado 14 desde 1980), no han coincidido históricamente con una disminución en el Producto Interno Bruto (PIB).
Sin embargo, Moëc advirtió que el impacto nunca es insignificante y citó datos de la Oficina Presupuestaria del Congreso que revelaron que el último cierre, que ocurrió entre diciembre de 2018 y enero de 2019 y duró 35 días, tuvo un costo del 0.1% del PIB en el cuarto trimestre de 2018 y del 0.2% en el primer trimestre de 2019 para la economía estadounidense.
Sin embargo, el cálculo que se realiza no tiene en cuenta el período anual, según afirmó el autor del texto. Al considerar este aspecto y ajustarlo a la forma en que normalmente se presenta el crecimiento del PIB en Estados Unidos, el impacto parece ser mucho más relevante (0.4 por ciento en el cuarto trimestre de 2018 y 0.8 por ciento en el primer trimestre de 2019), según explicó el analista.
Por ahora, nadie sabe con certeza cuánto tiempo durará la interrupción de la Administración. El cierre que tuvo lugar entre 2018 y 2019 fue el más largo en la historia del país, pero la mayoría se solucionaron en pocos días. Sin embargo, si la situación se extiende, el cierre podría tener efectos imprevistos.
Un ejemplo de esto sería si las agencias encargadas de recolectar y difundir los principales indicadores económicos del país, como la inflación, el PIB y el desempleo, dejaran de proporcionar sus datos habituales. Esto podría dificultar el trabajo de la Reserva Federal (Fed), ya que en noviembre deberá tomar la decisión de si aumenta o no las tasas de interés.
En un informe presentado al grupo OANDA, el analista Edward Moya expresó su preocupación de que debido al creciente riesgo de un cierre de una o dos semanas, es probable que la Reserva Federal (Fed), que toma decisiones basadas en los datos, no cuente con suficiente información para considerar seriamente aumentar las tasas en noviembre.
El mercado financiero de Wall Street registró una gran inseguridad durante el mes de septiembre, lo que resultó en importantes pérdidas en los índices S&P 500 y Nasdaq. Además, el Dow Jones de Industrales, el indicador principal, también cerró el mes con significativas pérdidas.
Si los legisladores estadounidenses no llegan a un acuerdo antes de las 23:59 de este sábado para aprobar un plan de financiación, la mayoría de las agencias gubernamentales, museos y parques nacionales cerrarán. Además, 1.3 millones de militares y cientos de miles de funcionarios no recibirán su salario.
Según datos de la agencia EFE
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