Una mujer en Australia está siendo acusada de haberles servido hongos venenosos a los padres de su exmarido, lo cual resultó en la muerte de tres adultos mayores. La policía está investigando este extraño incidente para determinar la posible responsabilidad de la mujer, quien los invitó a almorzar en su casa.

En este caso, el centro de atención es Erin Patterson, quien solía ser la nuera de Gail y Don Patterson. Según los antecedentes, Erin organizó una comida a la que también fueron invitados Heather Wilkinson, la hermana de Gail, y su esposo Ian.

El exmarido de la persona mencionada, llamado Simon Patterson, también estaba invitado a este evento, sin embargo, debido a un asunto repentino, no pudo asistir, lo cual a su vez le permitió cuidar de su salud.

Cuatro personas mayores, con edades entre 66 y 70 años, se pusieron muy enfermas después de comer. Desafortunadamente, Gail, Don y Heather fallecieron en poco tiempo, mientras que Ian está en estado crítico y necesita un trasplante de hígado.

Después de que las personas involucradas fallecieron, la policía de Australia fue a la casa de Erin para llevar a cabo la investigación y encontraron un deshidratador de alimentos en la basura. Se sospecha que este aparato fue utilizado para preparar los champiñones venenosos.

Existe un hecho importante que plantea dudas sobre la inocencia de la mujer. Antes de su separación, Simon estuvo al borde de la muerte en mayo de 2022 debido a una enfermedad misteriosa que lo llevó a estar en coma inducido.

El individuo mencionó que publicó este mensaje en plataformas digitales: "Colapsé en mi hogar, luego estuve en un estado de coma inducido durante 16 días, durante los cuales me sometí a tres cirugías de emergencia, principalmente en mi intestino delgado. Mi familia fue llamada dos veces para despedirse de mí, ya que no se esperaba que sobreviviera".

Aunque está siendo investigada, Erin fue puesta en libertad después de quebrarse ante la policía y afirmar que es inocente en relación a la muerte de las personas involucradas.

Según un periódico británico, la mujer sospechosa tuvo un colapso emocional frente a las cámaras en su casa el lunes (7 de agosto) y afirmó que no había hecho nada mientras la policía llevaba a cabo la investigación. Cuando se le preguntó sobre el origen de los hongos, quién los recolectó o qué comida preparó para sus invitados, no dio ninguna respuesta.

Patterson expresó a los investigadores su amor hacia sus exsuegros y su devastación por su pérdida. Mencionó que Gail, en particular, era como una figura materna para ella, ya que su propia madre falleció hace cuatro años. Destacó la bondad y amabilidad que siempre recibió por parte de Gail.

Según el inspector de policía Dean Thomas, están investigando para determinar si la persona que no se enfermó comió los champiñones en el almuerzo. Su objetivo es descubrir la causa exacta del envenenamiento de las cuatro personas que estuvieron presentes.

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