En cumplimiento al Tratado de Extradición firmado entre México y Estados Unidos de América, fue extraditado al gobierno de aquel país un individuo de nacionalidad mexicana requerido por la Corte del Segundo Distrito Judicial del Estado de Nevada para que termine de cumplir la sentencia que le fue impuesta por los delitos de homicidio y lesiones.
En marzo de 1993, Samuel “A”, se declaró culpable de conducir un vehículo en estado de ebriedad, causando un choque que resultó en la muerte de una persona y lesiones a dos menores de edad. El extraditable, ingresó a un centro de mínima seguridad, sin embargo escapó de la custodia del Departamento de Correccionales de Nevada.
El Gobierno de México concedió la extradición del reclamado al Gobierno de los Estados Unidos de América.
La entrega de este hombre se realizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), a los agentes estadounidenses designados para su traslado final a Las Vegas, Nevada.