Los migrantes empezaron a hacerse la prueba de Covid-19 como evidencia de su estado de salud para el gobierno de Estados Unidos. Esto como parte de su proceso de asilo.

En el albergue de Tijuana, siete migrantes fueron a realizarse los análisis para obtener una cita de asilo el 19 y 22 de febrero. Entre los migrantes estaba una niña de 3 años, a quien también se le hizo la prueba.

De igual forma, aseguraron que no tenían claro si también les realizarán la prueba de Covid-19 al ir a su audiencia. Sin embargo, buscan llevar todos sus documentos en regla para poder esperar su resultado en el territorio mexicano.

Las pruebas de Covid-19 tienen un costo promedio de 50 o 950 pesos cada una. No obstante, son gratuitas cuando una persona presenta varios síntomas o antecedentes de viaje a una zona contaminada.

“Para que todos los de migración se sientan más confiados más seguros. Pues queremos llevar el examen… para que sientan un poquito más confiable de uno”, dijo Erik Mazariegos, migrante de Guatemala.

El pasado 12 de febrero, el gobierno de Joe Biden anunció que miles de solicitantes de asilo que esperan en México podrán ingresar a Estados Unidos mientras sus casos siguen avanzando.

Se estima que alrededor de 250 mil solicitantes de asilo que están en México con casos abiertos podrían comenzar a pasar a Estados Unidos, según las autoridades.

Se tiene planeado empezar con dos pasos fronterizos, los cuales procesarán a los migrantes con hasta 300 personas al día. Además, habrá un tercer paso fronterizo donde pasará menos gente. Los funcionarios gubernamentales prefirieron no identificarlos por temor a que los migrantes a acudir en masa allí.

Con información de Telemundo.