Una multitud de manifestantes irrumpió en el Capitolio de Estados Unidos el miércoles mientras buscaban obligar al Congreso a desestimar la derrota electoral del presidente Donald Trump, suspendiendo temporalmente un último esfuerzo de algunos de los socios republicanos del mandatario para descartar los resultados.
La policía lanzó gases lacrimógenos y ordenó la evacuación de varios edificios de oficinas después de que los manifestantes irrumpieron en el Capitolio y fueron vistos marchando por los pasillos del Congreso, donde los legisladores se reunían para certificar la victoria del presidente electo Joe Biden.
La policía escoltó a los miembros de la Cámara de Representantes desde el sector donde habían estado debatiendo después de que los legisladores alineados con Trump desafiaran los resultados de las elecciones, un esfuerzo que probablemente no tendrá éxito. El Senado levantó la sesión abruptamente y el vicepresidente Mike Pence, que había presidido una sesión conjunta del Congreso, fue escoltado fuera de la cámara.
La policía del Capitolio dijo a los legisladores en la Cámara que sacaran máscaras antigases de debajo de sus asientos y se prepararan para ponérselas. Los agentes en la puerta principal de la Cámara baja desenfundaron sus armas cuando alguien intentó ingresar. Posteriormente ordenaron a las personas en el salón que se tiraran al piso por seguridad.
Las caóticas escenas se produjeron después de que Trump se dirigiera a miles de seguidores cerca de la Casa Blanca, repitiendo sus afirmaciones infundadas de que le robaron las elecciones debido a un supuesto fraude generalizado.
Funcionarios electorales de ambos partidos y observadores independientes han dicho que no hubo fraude significativo en la contienda del 3 de noviembre, que Biden ganó por más de 7 millones de sufragios en el voto popular nacional.
Han pasado semanas desde que los estados completaron la certificación de que Biden, un demócrata, ganó las elecciones por 306 votos del Colegio Electoral frente a los 232 de Trump. Los variados desafíos de Trump a la victoria de Biden han sido rechazados por cortes de todo el país.
Se esperaba que la certificación en el Congreso, normalmente una formalidad, se prolongara durante varias horas mientras algunos legisladores republicanos se esforzaban por rechazar algunos conteos estatales, comenzando por Arizona.
Fuera del Capitolio, miembros de milicias y grupos de extrema derecha, algunos con chalecos antibalas, se mezclaban con la multitud. Manifestantes que coreaban consignas a favor de Trump derribaron barricadas y se enfrentaron con la policía.
En Twitter, Trump pidió a los manifestantes que se mantuvieran en paz. Mientras, la alcaldesa de Washington D.C., ordenó un toque de queda en toda la ciudad a partir de las 6 p.m. (2300 GMT).