(NOTICIAS YA).- Una estudiante de Georgia fue sentenciada a 4 meses de prisión en las Islas Caimán tras romper el protocolo de Covid-19 del territorio británico caribeño mientras visitaba a su novio para una competencia de moto acuática. 

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Skylar Mack, de 18 años y estudiante de Mercer University, viajó a las Islas Caimán el 27 de noviembre tras dar negativo por Covid-19 en casa; dijo su abuela, Jeanne Mack, a CNN. 

Cuando Skylar Mack aterrizó, le administraron otra prueba de Covid-19, la cual dio negativo, y las autoridades le ordenaron permanecer en aislamiento por 2 semanas. Sin embargo, la estadounidense rompió la orden y fue a la competencia de su novio dos días después. 

“En su mente, siempre y cuando se quedara alejada de todos, ella estaría bien para ver la carrera de su novio, era su gran carrera nacional final, la última carrera del año, algo grande”, dijo Jeanne Mack. 

Los asistentes a la carrera, que conocían a Skylar Mack, reportaron a la joven por romper la orden de aislamiento y los oficiales la arrestaron. Sin embargo, ella no fue la única en recibir cargos. 

Su novio, Vanjae Ramgeet, de 24 años, fue acusado de “ayudar e instigar el incumplimiento de ella”, según reportes de Cayman Compass. El hombre también fue acusado de no seguir regulaciones de Covid-19, según con el abogado Jonathon Hughes, quien representa a la pareja. 

Según Jeanne Mack, Skylar admitió en la corte que se “había equivocado”. Inicialmente la joven fue sentenciada a 40 horas de servicio comunitario y se le ordenó pagar una multa para cubrir su alojamiento de cuarentena mandatoria. 

Según las regulaciones de Covid-19 en las Islas Caimán, “una persona que contraviene esta regulación (romper la cuarentena) comete una ofensa y es sujeta a una convicción desde una multa de $10,000, hasta aprisionamiento de 2 años”. 

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El director adjunto de enjuiciamientos públicos de las Islas Caimán, Patrick Moran, apeló la sentencia original, según reportes de Cayman Compass. 

“Estas ofensas deberían ser enfrentadas con medidas más rigurosas”, dijo Moran al juez, según los reportes. “En lo que concierne a una cuestión de disuasión, las sentencias impuestas son propensas a tener poco o nulo efecto en otros individuos que piensan igual”. 

El martes, el juez Roger Chapple presentó una sentencia revisada. Según los reportes, dijo que entendía la necesidad de un balance, pero que descubrió que “la gravedad de la trasgresión era tal que la única sentencia apropiada sería una de aprisionamiento inmediato”. 

El abogado de la pareja dijo que planea apelar por una sentencia más ligera la próxima semana. “Esperamos que la apelación sea escuchada por la Corte de Apelaciones de las Islas Caimán en la mañana del martes”. 

Las autoridades describieron las acciones de Mack como premeditadas, debido a que un día antes de romper la orden llamó al departamento de salud para pedir que aflojaran el brazalete que monitoreaba su locación; dijo la abuela de la joven. Aunque su familia asegura que ella les envió fotos mostrando el brazalete apretado. 

Tras la sentencia, Mack fue llevada inmediatamente a prisión, donde está siendo detenida con la población general. De acuerdo con su familia, la joven no tiene permitido llamarles todos los días. 

“Ella llora cada vez que llama a casa. No ha podido comer desde que la pusieron en prisión”, dijo su abuela en CNN. La familia aseguró que la embajada de EE.UU. en las Islas Caimán les dijo que estaban usando a Mack como ejemplo. 

A pesar de lo que pueda creer la familia de Mack, la realidad es que la joven estaba consciente de las consecuencias que podría tener romper las reglas de Covid-19, y la sentencia final es tan sólo el 16% de lo que indica la ley. 

En otros casos se ha demostrado que un solo individuo asintomático puede crear brotes de Coronavirus potencialmente mortales. La prueba que Mack recibió indicó que no tenía una enfermedad activa, pero si se hubiese contagiado durante el viaje los signos de la enfermedad aparecerían hasta días después, por eso la cuarentena mandatoria es necesaria. 

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