Un equipo de rescatistas que ha estado trabajando en los escombros ocasionados por la explosión en Beirut, Líbano, detectó señales de vida bajo las ruinas de un edificio derrumbado por la detonación.
Después de un mes de la explosión que terminó con la vida de 191 personas y miles de afectados en esta ciudad, rescatistas y trabajadores de los servicios públicos en Beirut han estado trabajando en la zona para restaurar la ciudad que quedó devastada.
Fue gracias a estas labores que los rescatistas compartieron que han detectado señales de vida en una de las zonas afectadas, aunque los expertos añaden que sería casi imposible poder encontrar a alguien con vida debajo de las ruinas.
“Podría haber sobrevivientes en el edificio del barrio de Gemmayzeh. Una persona, de acuerdo con la cámara térmica, todavía tiene pulso. Esperamos que alguien haya sobrevivido”, declaró el gobernador de la ciudad, Marwan Abboud.
Marwan Abboud también reconoció que pese a que los escáneres detectaron un latido a dos metros por debajo de los cascotes, las esperanza de encontrar a alguien con vida más de cuatro semanas después de la deflagración, son mínimas.
Rescatistas, entre ellos un equipo chileno, excavaban este jueves en busca de supervivientes entre los escombros en un barrio de la capital libanesa destrozado por la explosión ocurrida hace un mes en el puerto adyacente de Beirut, después de que sus escáneres detectaran un posible rastro de vida.
Francisco Lermanda, jefe del equipo de rescatistas chileno, detalló que su equipo ha detectado 15 respiraciones por minuto, lo que sugiere que una persona atrapada podría estar en estado de coma. Por ello, los equipos de defensa civil libaneses y los bomberos de Beirut se encuentran excavando la zona.