La lealtad hacia un ex-presidente de la república ha terminado hoy con la declaración bajo juramento de Rosario Robles, quien antes de ser vinculada a proceso por la justicia mexicana por serias irregularidades de carácter económico, cuando fue secretaria de desarrollo social, en el gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto, ha revelado hoy que “le aviso” al ex-mandatario, sobre las inconsistencias por las que estará en prisión durante los próximos dos meses a partir de ayer.
Mientras tanto, el poder del ex-presidente Enrique Peña Nieto se debilita con esta declaración. No solo habla de una fractura personal entre ambos actores políticos, sino de un problema legal que por supuesto nadie quiere asumir.
Pero nunca antes le habían echado la culpa al presidente. Otro logro de la administración de EPN.