Líricamente, el álbum se inclina hacia la izquierda, pese a que es difícil asegurar si las letras se traducen bien al inglés, dibujando influencias de la historia, el marxismo y la política moderna. El primer tema, “La gran traición”, establece el tono con bastante rapidez, haciendo referencia a la creación de Israel y la partición de Palestina, un evento que catapultó al mundo al estado de cosas que vemos hoy.
Otras canciones que abordan idea son “He Dreamed”, tema antinacionalista, mientras que la última canción “Facing the War” hace referencia a los efectos negativos de las fronteras y las paredes (¿Una bofetada a Donald Trump?). “Divide and Rule”, “The Red Button”, y “Zero Tolerance” tienen una sensación orwelliana, con letras sobre cómo dividir a las masas para mantenerlas en línea y estar orgullosos de ser un traidor y elegir no vivir en un mundo donde los humanos son inherentemente malvados.
Sónicamente, el tono coincide perfectamente con el contenido lírico. La mayoría de las canciones son fuertes, rápidas y agresivas, mientras que muchos de los riffs principales tienen una sensación de metal. Hay momentos en que el tempo cambia rápidamente (“Opio”, “Tolerancia cero”), con desgloses de tipo hardcore en el momento adecuado. Y como la música, las voces combinan bien con las letras. Es difícil decir cómo sonaría la banda si cantaran en inglés, pero probablemente sea seguro decir que no sería tan apasionado o auténtico.
Este álbum definitivamente resonará en su país de origen. Es un intento sincero de retratar lo que es vivir en un lugar así. No estoy seguro de si la música encenderá un fuego en la personas promedio. Pero los punks definitivamente deben apreciar la perspectiva que da este álbum.