El Gobierno de Estados Unidos anunció este lunes nuevos aranceles para el acero mexicano.
Con esto, se pone en ridículo al gobierno mexicano encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha hecho vuelta y maromas para tratar de agradar al presidente Trump y el gobierno que encabeza.
A pesar de los esfuerzos por evitar aranceles, lo cierto es que Trump cambia de parecer cada nuevo día y así ha pasado con México, a quien le ha impuesto aranceles esta tarde.
La medida, que también afectará a producto de China, se da tras una investigación preliminar del Departamento de Comercio y en la que argumenta que el acero de ambos países recibe subsidios.
“De acuerdo con determinaciones preliminares, el Departamento de Comercio instruirá a Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos para que recolecten pagos en efectivo de importadores de acero estructural fabricado de China y México”, dijo el Departamento de Comercio en un comunicado.
La dependencia explicó que las determinaciones finales de la indagatoria se conocerán alrededor del 19 de noviembre próximo.
Un grupo relacionado al sector acerero con base en Chicago fue quien solicitó la investigación.
En 2018, las importaciones de acero estructural fabricado de Canadá, China y México se valoraron en un estimado de 722.5 millones de dólares, 897.5 millones y 622.4 millones, respectivamente, detalló el Departamento.
“Las leyes en materia de derechos antidumping y compensatorios otorgan a las empresas y trabajadores estadounidenses un mecanismo aceptado internacionalmente para buscar alivio a los efectos dañinos de los precios injustos de las importaciones en los Estados Unidos”.
Grandes esfuerzos ha hecho el gobierno mexicano para con Donald Trump, disponiendo de miles de soldados disfrazados de Guardia Nacional con una estampa en el brazo como distintivo y abocados, en su mayoría, en tareas de migración.