Durante esta semana, los residentes de Rocky Point, Long Island, en Estados Unidos vieron rondar a un ciervo al que se le había quedado atascada la cabeza dentro de un gran recipiente de plástico. No podía comer ni beber.
La situación era crítica porque el frasco de color naranja bloqueaba la visión del animal. Su cuerpo se debilitaba cada vez más. Aunque muchas personas lo vieron no pudieron seguir la pista del tímido animal antes de que desapareciera nuevamente.
El albergue Strong Island Animal Rescue League compartió su fotografía en redes sociales, con la esperanza de que alguien haya visto al venado y así ayudarlo. Debía tener frío y hambre. El recipiente en su cabeza era una bomba de tiempo.
Afortunadamente su búsqueda tuvo éxito. Después de evadir el rescate durante cinco días, el ciervo vagó por el patio de una casa y se acomodó en un montón de hojas. El propietario lo vio y se contactó con el equipo de rescate de inmediato.
El venado se veía cansado, pero aún así cuando los rescatistas intentaron rescatarlo, trató de huir. El presidente del refugio, Frankie Floridia, lo envolvió sus brazos alrededor del animal y lo colocó de nuevo en el suelo. Se las arregló para sacar rápidamente el contenedor de la cabeza del animal antes de arrancara.
Gracias a la rápida acción de Frankie, el venado finalmente estaba a salvo. Esperan que esté bien en su hábitat natural ahora que puede comer y beber. Por su parte, el rescatista, resultó con un labio partido y una rodilla raspada por el encuentro, pero dijo que “valió la pena” a The Dodo.
Source: UPSOCL