Final de Copa Libertadores tiene futuro incierto

Tras una noche de incertidumbre, en la que el partido de futbol más esperado del momento pasó a ser lo menos importante, se confirmó lo inevitable: la Conmebol anunció la postergación indefinida de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors, luego de los incidentes del sábado, en los que algunos aficionados agredieron el autobús xeneize en su trayecto al Estadio Monumental.

A pesar de los esfuerzos del organismo sudamericano para que se jugara la final, era evidente que la entidad azul y oro no estaba en condiciones de disputar el duelo, como lo manifestó en un comunicado.

Finalmente, tras conocer los argumentos del club xeneize, la Conmebol decidió cancelar el evento, que será reagendado este martes 27, en una reunión en Paraguay.

No obstante, Boca buscará obtener el título de la Libertadores sin jugar el partido.

Soy de los que piensan que los partidos se ganan y se pierden en la cancha. Pero también tengo una responsabilidad como presidente del club y tengo que aferrarme a los estatutos”, declaró Daniel Angelici, directivo de Boca Juniors.

Había un pacto de caballeros firmado entre los mandatarios de ambos equipos, sin embargo, Angelici, un día después de los hechos, consideró que su club aún estaba limitado.