YUCATÁN
El llamado oro verde de Yucatán, el henequén, se ha transformado.
Esta fibra es utilizada ahora para la moda, se realizan zapatos, bolsas, carteras y artesanías.
Moisés Poot desde su taller ubicado en la comunidad de Hunucmá, Yucatán, ha sido uno de los que ha innovado con este producto cien por ciento ecológico.
Para competir con los grandes hay que hacer las cosas diferentes. Siempre he sido muy a fin a las cosas naturales, a las fibras de este tipo. Estamos muy metidos en el tema de protección de animales entonces no usamos los productos de piel”, comentó Moisés.
A Moisés su discapacidad motriz no le impidió salir adelante.
Tenía un año cuando fue diagnosticado con polio y desde entonces se ha movido en silla de ruedas.
Hoy emprende un negocio y genera empleos.
Al hacer espacios exclusivos para las personas que ellos sólo pueden trabajar en eso; sí incluyen, pero son punto y aparte, realmente en mi caso yo no aspiraba a eso, los únicos que sabemos que capacidad tenemos somos nosotros”, dijo.
En su taller de ensamble trabajan siete personas, además, de otras 40 mujeres del interior del estado quienes hacen los tejidos.
Todo es a base de la fibra de henequén, se realizan accesorios como aretes, collares, bolsas de diferentes tamaños y zapatos.
Se encuentran prendas que van desde los 100 pesos hasta los mil pesos.
Lleva historia, cada producto lleva un poquito de historia, a parte las manos que trabajan, sobre todo en el tejido, son manos indígenas que ahí sigue la historia. La a modernidad en la ciudad ya llegó, pero todavía se respeta mucho las tradiciones”, aseguró Moisés.
Moisés Poot inició su negocio desde hace ocho años.
Su trabajo artesanal lo ha llevado a mercados internacionales como Estados Unidos y algunos países de Europa.
Desde 2015, su nombre es la marca de un producto 100 por ciento yucateco.
Así como Moisés, la comunidad de Hunucmá se ha vuelto un lugar donde hombres y mujeres elaboran zapatos lo que pasa de generación en generación.
*amgl
Source: Excelsior