Los misterios que guarda el espacio exterior son materia de estudio y también fuente de inspiración para crear libros, películas, series de televisión o canciones debido a la curiosidad que tiene el ser humano por descubrir lo que ocurre más allá de las nubes.

Por ello, la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio, conocida como NASA, tiene desde hace 60 años la misión de escudriñar el Universo.

De la mano del presidente estadunidense, Dwight D. Eisenhower, la NASA fue creada el 29 de julio de 1958, sin embargo, comenzó a operar el 1 de octubre. En ese momento el cielo dejó de ser el límite para concentrarse en nuestro universo, un lugar con 13,800 millones de años de antigüedad.

Un año antes, la carrera por el espacio había iniciado con dos grandes competidores: la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y Estados Unidos. A T. Keith Glennan, presidente de Case Institute of Technology en Ohio, se le encargó la misión de liderar la NASA, con lo que se convirtió en el primer administrador.

Pero, el 16 de julio de 1969 –en plena Guerra Fría–, Estados Unidos tomó la delantera en la conquista del espacio con la llegada a la Luna.

De acuerdo con el portal de la NASA, los estadunidenses quedaron rezagados con respecto a Europa en tecnología de aviones, entonces el Congreso fundó el Comité Asesor Nacional de Aeronáutica el 3 de marzo de 1915, como una agencia gubernamental independiente que dependía directamente del Presidente.

Durante 40 años, este comité realizó investigaciones aeronáuticas que con el tiempo se transfirieron a la incipiente industria aeroespacial, que condujo a la economía estadounidense a fines del siglo XX.

Desde hace 60 años la NASA ha puesto todosu esfuerzo en tratar de trasladar a personas a la Luna, llegar a Marte o lanzar una sonda que se acerque más que ninguna otra al Sol, pero hoy también se enfrenta al gobierno de Trump que sigue bajando el presupuesto y a las naciones, ya no sólo Rusia, que buscan llegar más allá de los límites.