Rabat, 1 Mayo 2018 (AFP) –
Marruecos rompió relaciones diplomáticas con Irán, acusado de haber facilitado la entrega de armas al Frente Polisario a través de su aliado libanés Hezbolá, anunció el martes el ministro marroquí de Relaciones Exteriores.
El Frente Polisario, movimiento independentista saharui, “recibió recientemente una primera entrega de armas” a través de territorio argelino, con la mediación de un “elemento” en la embajada iraní en Argel, indicó el ministro, Nasser Bourita, a periodistas.
“Marruecos dispone de pruebas irrefutables, nombres identificados y hechos precisos que corroboran esta connivencia entre el Polisario y el Hezbolá contra los intereses supremos del reino” afirmó el jefe de la diplomacia marroquí.
El embajador de Marruecos en Teherán “abandonó el martes Irán y voy a pedirle al encargado de negocios de la embajada de Irán que abandone el reino inmediatamente” añadió Bourita.
El ministro realizó esas declaraciones a su regreso de Teherán, donde informó personalmente de las medidas a su homólogo iraní, Mohammad Javad Zarif, según explicó a los periodistas.
El Sáhara Occidental, un desierto de 266.000 kilómetros cuadrados, cuyo estatuto postcolonial aún no ha sido resuelto, es reivindicado por Marruecos -que controla su mayor parte- y por el Frente Polisario, que pide un referéndum de autodeterminación.
Marruecos solo está dispuesto a negociar un estatuto de autonomía bajo su soberanía.
Ambos contendientes firmaron un alto el fuego en 1991 que aún se mantiene en vigor.
El Consejo de Seguridad adoptó el viernes pasado una resolución que pide a las partes enfrentadas una “negociación sin precondiciones”. El máximo órgano de la ONU prolongó solamente seis meses el mandato de la misión para la organización del referéndum (Minurso), que vencía el 30 de abril.
La misión, con 400 personas, fue prolongada hasta el 31 de octubre.
La última ronda de negociaciones entre Marruecos y el Frente Polisario se remonta a 2008.