La semana pasada los fanáticos de Anatomía de Grey sufrieron un duro golpe -que aunque deberían estar acostumbrados dado el historial de la serie, nunca es fácil de asimilar- dos de los personajes más queridos de la serie, Arizona Robbins y April Kepner, dejarán sus actuaciones tras finalizar esta temporada.
Tras 10 años de participación en una de las series más exitosas de la televisión estadounidense, Jessica Capshaw y Sarah Drew fueron despedidas por “razones creativas”, no porque las actrices estuvieran buscando nuevos proyectos.
Sin embargo, el medio dedicado al cine y las series Deadline publicó un artículo aludiendo a otra como la razón del despido de las actrices: la reciente negociación salarial de Ellen Pompeo, protagonista de la serie.
Desde hace bastante tiempo, Pompeo lleva trabajando y negociando para convertirse en la actriz mejor pagada de la televisión por una serie de drama en Primetime. Y lo consiguió en su renovación de contrato por dos años, ganando 575 mil dólares por capítulo que suman más de 20 millones al año por temporada.
Y bueno, Deadline insinuó que para pagar ese sueldo tuvieron que despedir a las dos actrices, algo que ni Pompeo ni Krista Vernoff -showrunner de la serie-, tomaron con demasiado agrado y fueron tajantes en negar las acusaciones.
Y esto es lo que dijo:
“Es desafortunado que @DEADLINE elija enfrentar a las mujeres en el Día Internacional de la Mujer”.
Y siguió:
“Soy una chica grande. @DEADLINE puede atacarme si quiere, pero los fans por favor no caigan en la trampa. Esto está por encima de mi salario”.
Esos fueron los primeros tweets de Pompeo, quien tres días más tarde de saberse la noticia volvió a referirse al tema en sus redes sociales.
“Estamos muy agradecidos de que todos ustedes sean tan apasionados, pero si conocieran a estas mujeres de la forma en que yo las conozco, sabrían que ellas no aprobarían toda esta maldad”.
“Las dos son personas muy felices. Sé que están enojados, pero su representación no puede estar más lejos de lo que realmente son estas mujeres”.
Sin embargo, para muchos de sus fans no fue tan acertado que se refiriera al tema tres días después y no de inmediato. Además, no compartieron la forma en la que lo hizo.
“Realmente te respeto a ti y tu trabajo, Ellen, pero creo que tus declaraciones vienen un poco tarde y no están ayudando a la situación, mucho menos si te refieres a ellas como “estas mujeres”. La gente está infeliz y justificadamente. Sarah Drew y Jessica Capshaw merecen respeto”.
Y ella, no tardó en responder.
“Por favor no me acuses de ser irrespetuosa, no importa lo que yo diga, nada de lo que diga está bien, así que ya no diré nada más”.
Vernoff también emitió declaraciones en su Twitter sobre el tema, negando las acusaciones y rectificando que la salida de las actrices eran solo por razones creativas, no económicas.
“La sugerencia de que los cambios en nuestro reparto están de alguna forma relacionados con la renegociación del salario de Ellen Pompeo es equivocada, hiriente y desviada. Huele a una vieja y rota noción patriarcal de que las mujeres deben enfrentarse y de que el éxito de una será costoso para las demás.
Ellen Pompeo no sólo ha abogado de forma apasionada por sus compañeras de reparto. Se ha tomado tiempo para enseñar a las mujeres de todo el mundo a defenderse a sí mismas y no hay que darle la vuelta ahora a eso. La decisión de hacer cambios ha sido creativa”.
¿Qué opinan al respecto? Yo sólo creo que es bastante curioso que justo en el momento que Pompeo se convierte en la actriz mejor pagada de la televisión, despidan a dos compañeras de reparto.
Pero son ustedes los que deben decidir qué pensar.
Source: UPSOCL
