José Antonio “N” eligió mal a sus víctimas. Con un revólver calibre .22 se acercó a dos hombres que estaban a bordo de un automóvil estacionado en el pueblo de Santa Cruz Acalpixa, en la delegación Xochimilco.Sin saber que eran policías de investigación les apuntó y les exigió sus pertenencias. Uno de los agentes le entregó su teléfono celular, el otro le dio una mariconera. Aparentemente el presunto ladrón no se dio cuenta que sus víctimas estaban armadas y les dio la espalda para huir.Según los reportes preliminares de la policía capitalina, eran alrededor de las 4:30 de la tarde cuando los dos agentes —adscritos a la Fiscalía de Robo de Vehículos— descendieron de un Dodge Attitude color gris en las calles Tenochtitlan y Pozitos. De acuerdo con la versión de los agentes, le gritaron al sospechoso que se detuviera, pues eran policías.José Antonio habría volteado y realizado un par de disparos a los elementos de la PGJ, quienes también abrieron fuego, hiriéndolo en las piernas y la cabeza.En el lugar quedó la mariconera, el celular y el arma que llevaba el presunto delincuente, quien falleció antes de la llegada de los paramédicos de Rescate Xochimilco.Minutos después, cuando la zona ya había sido acordonada por policías preventivos, llegó al lugar una mujer de 42 años, quien identificó al hombre abatido como José Antonio, quien dijo era su hijo.La Procuraduría capitalina investiga la actuación de sus dos agentes. leer más
Source: El Gráfico