El 14 de septiembre de 2015, el Departamento de Comunicaciones Sociales de Carabineros ofreció un desayuno para amenizar la presentación del recién asumido general director Bruno Villalobos Krumm ante los medios de comunicación. La lista de invitados incluyó a TVN, Mega, Chilevisión, Canal 13 y CNN, entre otros canales de televisión, radios, periódicos y agencias de noticias.
Abriendo su arenga, el mandamás de la policía envió un mensaje a quienes aún recordaban su presunta vinculación con una red dedicada a intervenir teléfonos de parlamentarios al margen de la ley, tal como denunciara en julio de 2011 el ex suboficial Esteban Infante en una exposición a la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados.
Según explicó Villalobos, la acusación efectuada en su contra, y por la cual declaró como imputado ante el fiscal Metropolitano Sur Raúl Guzmán, no había sido acreditada por la Corte Marcial, que dio un cierre a la investigación tras declararse incompetente el Ministerio Público.
De acuerdo a Revista Qué Pasa, Villalobos también dedicó palabras a “la situación de su hijo, doctor del mismo nombre, quien se desempeña como médico en el Hospital de Carabineros”, precisando “que él había sido uno de los mejores alumnos de su generación y que por méritos propios quiso entrar al hospital institucional”, todo ello para evitar “suspicacias sobre algún tipo de nepotismo”.
La intervención espontánea guardaba relación con una solicitud periodística de este medio realizada un mes antes a Villalobos que buscaba detallar, conforme a la Ley de Transparencia, la relación laboral que mantenía su hijo con la institución.
La respuesta llegó en días cercanos al desayuno. En ella, el general proporcionó copia de la Resolución Nº 288 del Hospital de Carabineros del 6 de mayo de 2013, que dispuso la contratación de su hijo, el médico Bruno Villalobos Coz, para cumplir funciones bajo el régimen del Código del Trabajo con una jornada de 12 horas semanales, percibiendo una remuneración mensual de $901.467 por ese concepto.
Otros documentos llevaron a El Ciudadano a advertir que un año y medio más tarde, el contrato fue modificado para aumentar el sueldo de Villalobos Coz a $1.500.041, ordenándole cumplir un horario que en la práctica estaba imposibilitado de satisfacer, ya que al mismo tiempo concurría a un programa de especialización brindado por la Universidad de Valparaíso en el Hospital Militar, el cual era pagado a través de una beca de Carabineros.
El aumento quedó registrado en la Resolución Nº 916 del 3 de octubre de 2014, donde el HOSCAR amplió la jornada del doctor Villalobos a 22 horas semanales, argumentando la necesidad de contar con personal dispuesto a cubrir “la alta demanda de atención en el Servicio de Urgencia”, algo imposible de realizar por el hijo del director, cuya especialización se extendió hasta abril de 2017 en otra dependencia.
El propio Ejército de Chile, a través de una segunda solicitud realizada por este medio, confirmó que Villalobos Coz cumplía “una jornada de Lunes a Viernes, de 08:00 a 17:00 hrs” en el Hospital Militar, y “un turno semanal cada seis días, desde las 17:00 hasta las 08:00 hrs., a excepción de los turnos de fines de semana, cuyo horario es desde las 09:00 AM hasta las 09:00 AM del día siguiente”.
El documento que facilitó la no concurrencia del doctor Villalobos al Hospital de Carabineros, y que impidió hacer descuentos al sueldo que percibía en forma paralela al curso becado por la institución, corresponde a la Resolución Exenta Nº 2630 del 9 de julio de 2015.
La misma establece que la asistencia de Villalobos al programa debe darse “con dedicación exclusiva”, permitiéndole estar liberado del cumplimiento de la jornada laboral propia del Código del Trabajo. El acto también dispuso devolver todo descuento efectuado al profesional por no marcar el sistema de control reloj.
Por lo anterior, el diputado y miembro de la Comisión Investigadora del denominado “Pacogate”, Leonardo Soto (PS), estimó necesario que la Contraloría General de la República aclare “si el acto administrativo que aumentó el sueldo del señor Villalobos (hijo) y la posterior resolución exenta Nº 2630 del Hospital de Carabineros, se ajustaron a derecho”, para que en caso contrario inicie una fiscalización que establezca “eventuales infracciones y las sanciones correspondientes”.
Así requirió Soto en un oficio enviado al contralor Jorge Bermúdez el pasado 20 de octubre, donde también solicitó conocer las acciones que tomó la Contraloría cuando este medio envió una petición similar al ente en julio de 2016, la cual, hasta el momento, no ha tenido respuesta.
VER DOCUMENTOS
–Resolución Nº 288 del Hospital de Carabineros del 6 de mayo de 2013.
–Resolución Nº 916 del Hospital de Carabineros del 3 de octubre de 2014.
–Resolución Exenta Nº 2630 del Hospital de Carabineros del 9 de julio de 2015.
–Respuesta del Ejército de Chile sobre horarios de Bruno Villalobos Coz en Hospital Militar.
–Oficio del diputado Leonardo Soto al contralor Jorge Bermúdez, de fecha 20 de octubre de 2017.
Source: El Ciudadano