La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX) consignó al conductor de la pipa de agua que, al transitar a exceso de velocidad, perdió el control del vehículo, provocando la muerte de cinco personas y lesiones a cinco más. En un reporte en el espacio de Juan Francisco Rocha se informó que el sujeto quedó a disposición del Ministerio Público en donde se inició una carpeta de investigación por el delito de homicidio culposo por tránsito de vehículos. En la audiencia inicial, un juez de control calificó como legal la detención y le impuso, como medida cautelar, prisión preventiva. La audiencia para resolver la vinculación a proceso se llevará a cabo el próximo 3 de octubre. Derivado de las diligencias, se estableció que el conductor viajaba a una velocidad de 120 kilómetros por hora, cuando la permisible es de tan solo 50, en el informe médico se estableció que el conductor no presentaba ningún grado de alcohol, pero sí indicios de haber consumido metanfetaminas. El fiscal en Miguel Hidalgo, Said Escudera Irra, señaló que de acuerdo a los peritajes se concluyó que "el vehículo no presentó problemas de frenos, es decir que funcionaban adecuadamente en el momento, esto es muy importante en el de mecánica, el de tránsito nos establece que lo hacía a una velocidad aproximada de 120 kilómetros, es decir 70 kilómetros más". Además, dijo, los indicios de metanfetaminas en su organismo agravarían su situación jurídica, "la penalidad se elevaría si la ingesta de alguna metanfetamina fue directamente la que provocó el descontrol o que él perdiera la atención, que se durmiera, todavía esto está por determinarse". En caso de que las pruebas resulten perjudiciales para el chofer, el representante social solicitará audiencia ante un juez de control para que lo vincule a proceso por el delito de homicidio culposo. De encontrarse penalmente responsable, el hombre podría alcanzar una condena de hasta 20 años de prisión. Con información de Juan Antonio Jiménez tls