BUENOS AIRES, 7 sep (Reuters) – La Cancillería de Argentina dijo el jueves que el mercado de la Unión Europea (UE) volverá a abrirse a las exportaciones de biodiésel del país en unas dos semanas, luego de que el bloque aprobó la modificación de los elevados aranceles contra los embarques argentinos del biocombustible.
La declaración del Gobierno argentino se conoce en momentos en que los miembros de la Comisión Europea se encuentran reunidos para discutir la reapertura del mercado, luego de haber impuesto sanciones arancelarias acusando que el biodiésel argentino se comerciaban a un precio injustamente bajo.
Si bien el bloque aún no ha hecho ninguna declaración formal, una fuente de la Comisión Europea dijo que la UE espera bajar los aranceles a importaciones de biodiésel argentino para el 28 de septiembre.
El mercado europeo se encuentra cerrado al biodiésel argentino desde 2013, cuando la UE aplicó impuestos de entre un 22 y un 25,7 por ciento a sus embarques.
Sin embargo, la Organización Mundial de Comercio (OMC) falló a favor de los reclamos de Argentina contra las tasas impuestas por la UE, lo que ha obligado al bloque a revisar sus medidas.
“La Argentina tendrá, en un plazo de aproximadamente dos semanas, la reapertura del mercado de biodiésel de la Unión Europea, luego de que se aprobara la readecuación de aranceles conforme al fallo de la OMC”, dijo la Cancillería en un comunicado.
La reapertura del mercado europeo representa un alivio para la industria de biodiésel de Argentina, que a fines de septiembre también vio bloqueado su acceso al mercado de Estados Unidos -el destino del 90 por ciento de sus exportaciones- por acusaciones similares a las de la UE.
“Esto es muy importante. Es lo que estábamos esperando después de una discusión de cuatro años (…) donde se termina demostrando que la Argentina no vende biodiésel con subsidios ni con dumping”, dijo a Reuters Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio).
Antes de que la UE aplicara las tarifas al biodiésel argentino, el mercado europeo llegó a representar cerca de 2.000 millones de dólares para el sector instalado en Argentina, donde empresas como Bunge y Cargill poseen plantas de elaboración del producto.
Sin embargo, si bien explicó que el europeo es un mercado muy importante, Zubizarreta no se arriesgó a dar detalles con respecto a los volúmenes de biodiésel que serían enviados a Europa nuevamente.
“Vamos a ser cautos, esperemos un poco a que se publique la norma”, señaló el titular de Carbio.
(Reporte de Maximilian Heath; reporte adicional de Caroline Stauffer y Jorge Otaola; Editado por Javier López de Lérida)
