México, 30 Ago (Notimex).- El analista soberano de México de Moody’s, Jaime Reusche, estimó que un eventual triunfo de Andrés Manuel López Obrador en 2018 va a disparar el peso, se tendrán que subir las tasas de interés, y habrá mucha volatilidad en los flujos cambiarios y de inversión, “algo de pánico inicial”.
“Si es que gana López Obrador, sabemos que va a haber un choque brutal, pero va a ser temporal y de corto plazo”, agregó durante la 18 Conferencia anual de Moody’s bajo el título “El futuro próximo: política comercial y elecciones”.
De aquí a las elecciones presidenciales de julio de 2018 en México, anticipó que habrá mucho ruido político y una muy intensa volatilidad, “porque los mercados financieros en Estados Unidos sí están preocupado por una victoria” del dirigente nacional de Morena, y durante la elección va a haber mucha volatilidad financiera”.
Precisó que en Moody’s, “no estamos tan seguros que va a ganar” López Obrador, y si bien hay una buena posibilidad de que lo haga debido a que actualmente está liderando las encuestas, aún no se han anunciado propiamente los candidatos de los otros partidos políticos.
“Entonces creemos, AMLO liderando, sí, es prematuro (que gane), es muy probable que sea la foto que vamos a ver a principios de año, pero por supuesto, la campaña es larga y desde acá hasta julio del próximo año tenemos mucho campo para que tropiecen los candidatos, en particular para que tropiece AMLO”, subrayó.
En opinión de Reusche, parece que el apoyo electoral a López Obrador ha llegado a una suerte de pico, “no parece que suba más de eso, a menos que haya un cierto voto escondido, pero es improbable que se genere mucho de ese voto escondido y lo que si sabemos es que va a ser una elección muy reñida”.
El analista soberano de México de Moody’s descartó que con un eventual triunfo del líder nacional de Morena estén en juego el modelo económico o las reformas estructurales aprobadas al inicio de esta administración.
Esto, explicó, porque el Congreso será un factor de contrapeso y tras la elección presidencial quedará fragmentado y ningún partido tendrá mayoría, ante lo cual se necesitará generar alianza, consenso y negociación para poder quitar o pasar nuevas reformas, “y eso se ve ligeramente improbable, a menos que haya algún imprevisto”.
No estamos tan asustando porque se quiten reformas o porque se cambie bruscamente el modelo económico de México, lo que sí es el factor de implementación, las reformas no se han terminado de implementar”, comentó.
Precisó que dos variables inciertas donde sí podría incidir un gobierno de López Obrador son la política fiscal y Petróleos Mexicanos (Pemex), pues ahí sí puede haber más discreción porque no necesitan tanto el consenso con el Congreso.
“Ahí si hay factores de riesgo, de medidas populistas, de medidas proteccionistas, de sacar gente clave que está transformando Pemex y es un proceso, no es algo que ya está solucionado, esto tiene que continuar durante varios años”, alertó Reusche.
